Este miércoles, como estaba pautado desde la semana pasada, los dos gremios del área pública bonaerense harán un paro a la espera de una mejora salarial que, por ahora, es esquiva.
Los estatales de ATE vienen de realizar una huelga general durante la semana pasada y, de no haber acuerdo en los próximos días, también trabajan en una medida de fuerza para el próximo lunes y martes. Exigen que la Gobernación llame a una nueva reunión de paritarias tras dos semanas de inactividad en la mesa de negociación técnica y, esta vez, proponga un aumento más cercano a sus pedidos.
Cabe recordar que en la última reunión, donde estuvieron sentados dirigentes de UPCN y FEGEPPBA también, la provincia ofertó un incremento del 28 por ciento con la particularidad de incluir el 7 por ciento pactado a principios de año para los dos primeros meses de 2015, es decir, enero y febrero. Esto significa que para marzo, en realidad, la propuesta no superaba el 21 por ciento.
A eso había que sumar otras cuestiones abordadas por el gremio que lidera Oscar De Isasi, también titular de la CTA Autónoma, como las sumas cobradas en negro y las recategorizaciones.
Lo cierto es que el Gobierno provincial convocará a una nueva reunión para hoy en la sede del Ministerio de Economía. Si bien no hay una versiones oficiales, los trascendidos indican que la tropa de Daniel Scioli, en procura de llegar a un entendimiento con el sector, elevaría la proposición a cerca del 40 por ciento -también incluyendo el 7 por ciento de enero y febrero, o sea, un aumento real del 33 por ciento en dos cuotas que empezarán a correr a partir de marzo y hasta el mismo mes del año próximo-.
"Esperemos que el Poder Ejecutivo tome el dato del paro y nos haga una oferta de aumento con un porcentaje de bolsillo muy superior al ya ofrecido", señaló De Isasi.
En este caso, los hombres de ATE no estarán solos porque también es día de inactividad en los hospitales públicos de la provincia. Los médicos de la CICOP, en efecto, proponen un cese de actividades a la búsqueda que calle 6 retome las tratativas con sus representantes luego de un primer acercamiento este mes que, por ahora, no resultó demasiado fructífero.
La administración provincial no formuló ninguna oferta a los profesionales de la salud que, como los docentes y trabajadores enrolados en la Ley 10.430, quieren mejoras en sus haberes y un porcentaje que convenza a sus bases. Todo en un año que asoma complicado en materia inflacionaria y terminado el 2014 que, en ese plano, deterioró su fuente de ingreso: tomando los índices que miden las consultoras privadas y algunos organismos públicos, el aumento generalizado de precios superó claramente la suba de sus salarios durante el último año.
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